El control casi absoluto del ELN sobre las minas de carbón en el departamento del Norte del Santander ha generado un clima de terror y extorsión que ha paralizado la economía local. Mineros, transportistas y empresarios viven bajo la constante amenaza de estos grupos armados, quienes imponen cuotas exorbitantes que van desde los 100.000 hasta los 200 millones de pesos mensuales.

Esta situación ha obligado a muchos a abandonar sus trabajos y ha llevado a crisis a numerosas empresas. La violencia asociada a esta disputa por el control de los recursos naturales ha desencadenado desplazamientos forzados, asesinatos y secuestros, convirtiendo a la región en una zona de conflicto donde la vida de los habitantes está en constante peligro. La presencia del ELN no solo afecta la seguridad de las personas, sino que también ahuyenta la inversión extranjera y frena el desarrollo de la región.
El impacto de las extorsiones del ELN en la minería de carbón en Norte de Santander

Las extorsiones del ELN a los mineros de carbón en Norte de Santander tienen un impacto devastador en la región. Los mineros y sus familias viven en constante miedo e inseguridad, y muchos se han visto obligados a abandonar sus trabajos y sus hogares.
Las extorsiones también afectan a la economía de la región. Las empresas mineras se ven obligadas a pagar grandes sumas de dinero al ELN, lo que reduce sus ganancias y las obliga a despedir trabajadores. Esto a su vez conduce al desempleo y la pobreza en la región.
La violencia y el desplazamiento forzado generados por el control del ELN sobre la minería de carbón también tienen un impacto negativo en la región. Los enfrentamientos entre grupos armados han dejado un rastro de muerte y destrucción, y muchas familias se han visto obligadas a huir de sus hogares.
El control del ELN sobre la minería de carbón en Norte de Santander es un problema grave que requiere una acción urgente por parte del gobierno. Es necesario tomar medidas para combatir el control del ELN y garantizar la seguridad de los mineros y sus familias.
El control del ELN en la minería de carbón en Norte de Santander:
El ELN controla casi el 50% de las minas de carbón en el departamento, imponiendo extorsiones a mineros, transportadores y empresarios. Esta situación ha generado un clima de miedo e inseguridad en la región, afectando la economía y la vida de los habitantes.

«A esta región (Catatumbo), le conviene la paz… Sin el ELN y las disidencias de las FARC, esto sería muy prospero.» William Villamizar, Gobernador Norte de Santander
Impacto de las extorsiones:
Los mineros pagan entre 100.000 y 150.000 pesos diarios, mientras que las empresas llegan a pagar hasta 200 millones de pesos mensuales. Estas extorsiones han llevado a muchos mineros a abandonar sus trabajos y a las empresas a cerrar sus operaciones, lo que ha generado desempleo y pobreza en la región.
Violencia y desplazamiento:
Los enfrentamientos entre grupos armados por el control de las rutas y las economías ilegales han generado desplazamiento forzado y violencia en la región. En los últimos años, se han registrado numerosos asesinatos, secuestros y desapariciones forzadas de mineros y sus familias.
Efectos en la economía:
El control del ELN sobre la minería de carbón afecta la inversión extranjera y el desarrollo económico de la región. Las empresas mineras se muestran reacias a invertir en la zona debido a la inseguridad y a la extorsión.