Si ya resulta suficientemente complejo vivir en #Venezuela, imagínese como la pasan aquellos que lamentablemente carecen del sentido de la visión. Conozca una casa habitada solo por invidentes, que luchan con ingenio para sobrevivir a la aguda crisis, sopesando la escasez de dinero y la precariedad de los servicios básicos. Esta es una historia de Manuel Alvarado.